Su utilidad principal es formalizar este tipo de operativas, dictando las condiciones necesarias que deben cumplir los transportistas, determinando las responsabilidades que hay que asumir con los mismos.

En este sentido, casi todos los transportes por carretera deben cumplir este acuerdo, con muy pocas excepciones como son las mudanzas o los transportes funerarios.

¿Qué es el CMR?

CMR es el acrónimo de Contract for the International Carriage of Goods by Road o Convenio sobre el Contrato para el Transporte Internacional de Mercancías por Carretera en su traducción al español.

Se trata de una medida respaldada por Naciones Unidas que establece normas internacionales para este fin, proporcionando un marco legal donde se establecen normas y reglamentos sobre las responsabilidades de transportistas, cargadores y consignatarios.

Así mismo, el CMR establece los límites de responsabilidad para el transportista en caso de pérdida o daño de las mercancías.

Si bien su nombre indica el uso de la norma para el transporte internacional, lo cierto es que su aplicación no solo cubre la distribución entre dos ubicaciones en diferentes países, también entre dos puntos dentro de un mismo país.

La historia del CMR

En mayo de 1956, auspiciado por Naciones Unidas, algunos países europeos como Alemania, Austria, Bélgica, Francia, Luxemburgo, Países Bajos, Polonia, Suecia y Suiza crearon esta carta de porte normalizada que, desde ese momento, se hizo obligatoria para el transporte internacional desde y hacia cualquiera de estos territorios.

En España, desde el día 13 de agosto de 2003 está en vigor la actual regulación de las normas de control de los transportes de mercancías por carretera, por la que se regula el uso obligatorio del documento de control administrativo exigible para la realización de esta operativa.

El 19 de enero de 2017, ASTIC (Asociación de Transporte Internacional por Carretera) y FNTR (Fédération Nationale des Transports Routiers) facilitaron el primer uso transfronterizo de eCMR – versión electrónica del documento - entre España y Francia. Posteriormente, la ONU confirmó su apoyo a eCMR el 24 de febrero de 2017.

Actualmente, cincuenta y ocho estados han ratificado la norma: todos los países europeos, numerosos estados de Asia Central y Medio Oriente y dos africanos – Marruecos y Túnez -.

¿Qué información contiene el convenio?

En su versión en papel, el documento se presenta generalmente en un formato A4 con varios ejemplares, cada uno de los cuales está destinado a un fin específico: uno para el destinatario, otro para el remitente, uno que acompaña la mercancía hasta su destino final y otro para la administración.

En él se deben incluir siempre los siguientes datos:

• La fecha y el lugar donde se firmó la nota de porte CMR.
• El nombre y la dirección del remitente, el transportista y el nombre y la dirección del destinatario (la persona a la que se dirigen las mercancías).
• Una descripción de los artículos y su procedimiento de embalaje – debe ser aceptable tanto para el remitente como para el destinatario -. Hay ocasiones en las que, por razones de seguridad, no siempre desea que el transportista pueda identificar los bienes valiosos.
• El peso de los productos.
• Cualquier impuesto asociado con los bienes, como derechos de aduana o tarifas de transporte.
• Instrucciones aduaneras y cualquier requisito adicional, como información sobre artículos de riesgo.

¿Por qué es tan importante para el sector?

El verdadero valor del CMR para la industria de transporte reside, en primer lugar, en su capacidad de sustituir los términos y condiciones de las empresas individuales por un conjunto estándar de requisitos y responsabilidades. Por otro lado, su implementación permite a las empresas del nicho operar con más confianza y eficiencia a través de las fronteras.

Paralelamente, el convenio también especifica los criterios mínimos para el transporte de mercancías por carretera, lo cual ayuda en la protección al consumidor al garantizar la seguridad de la carga en tránsito.

¿Qué pasa si hay algún problema?

Mediante el convenio CMR, el transportista se convierte en responsable de la carga hasta su entrega en destino. Por tanto, si aparecen daños, se pierde o retrasa, la culpa no es del empresario, sino de la otra parte.

Sin embargo, esto no penaliza necesariamente al transportista que, en el propio convenio, cuenta con un apartado de reservas donde, al recibir las mercancías para su transporte, puede y debe detallar las irregularidades: embalaje en mal estado, número de bultos diferente al indicado.

En definitiva, un convenio CMR es un instrumento que aporta más seguridad al transporte de mercancías y, por tanto, tanto transportistascomo empresas deben conocer su importancia.